Rosetta se acerca a su destino
El próximo 6 de agosto, tras un viaje de diez años por el espacio interplanetario, la nave Rosetta se convertirá en la primera de la historia en encontrarse con un cometa, orbitar a su alrededor y desplegar un módulo de aterrizaje en él.
El principal objetivo de Rosetta de la Agencia Europea del Espacio (ESA) es ayudar a entender el origen y la evolución del Sistema Solar. En particular, investigará el papel que pueden haber jugado los cometas a la hora de traer el agua a la Tierra, y quizás incluso la vida.
Tanto la llegada a la órbita como el aterrizaje sobre el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, son actividades que serán controladas desde Tierra por un equipo de ingenieros y una importante participación de GMV, concretamente con personal desplazado tanto en su Centro de Operaciones Científicas (Rosetta Science Operations Centre), que se encuentra dentro del Centro Europeo de Astronomía Espacial de la Agencia Espacial Europea (ESA/ESAC), situado en Villafranca del Castillo (Madrid), como en el Centro de Operaciones de la ESA (ESOC) en Darmstadt, Alemania, y en el Centro de Control (CC) del Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) en Toulouse, Francia.
GMV fue clave en la fase de concepción de la misión, el llamado “Mission Analysis” (Análisis de Misión), desde años antes a su lanzamiento y participa también, entre otras actividades, en la planificación de las operaciones científicas, el control de la planificación de tres instrumentos, y la preparación de las operaciones para la fase principal de la misión (la fase “cometaria”).
Por su parte, el personal de GMV en Alemania participa en las operaciones de “Flight Dynamics” (Dinámica de Vuelo), concretamente en el control de la trayectoria y la generación de los comandos necesarios para controlar la órbita y actitud de la sonda, ya desde su lanzamiento en 2004. Para las operaciones en las proximidades del cometa, el equipo de “Flight Dynamics” de GMV realiza tareas adicionales: diseño de las trayectorias de acercamiento, órbita y descenso; procesado de las imágenes tomadas con las cámaras a bordo de Rosetta; y estimación de las características del cometa que tienen influencia en la navegación.
Asimismo, el personal de GMV en Francia realiza el mantenimiento de las herramientas de cálculo que utilizan en el CC del CNES para calcular los criterios de iluminación y visibilidad necesarios para decidir el punto de aterrizaje sobre el cometa, así como las posibles trayectorias de descenso del lander (o módulo de aterrizaje) Philae.