GMV proporciona soporte crítico para las operaciones del final de la vida útil del METEOSAT-7 con telescopios ópticos
En septiembre de 1997 fue lanzado el satélite Meteosat-7, operado por EUMETSAT, la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos. Es el último satélite de la primera generación de Meteosat.
Primero sobre Europa y, más tarde, desde su actual localización orbital sobre la región del océano Índico, a 36.000 Km sobre nuestras cabezas, ha estado prestando un fructífero servicio durante casi dos décadas, un periodo que ya está llegando a su fin.
Para evitar la proliferación de basura espacial en el abarrotado anillo geoestacionario, EUMETSAT llevará a cabo un cambio de órbita hacia la llamada órbita “cementerio”, situada al menos a 250 km por encima de la localización actual. Estas operaciones al final de la vida útil se realizarán siguiendo las más recientes recomendaciones incluidas en la norma 24113 de la Organización Internacional para la Normalización (ISO) relativa a la reducción de la basura espacial.
El traslado a la nueva órbita se iniciará el 3 de abril de 2017 por medio de una serie de maniobras sucesivas, cada medio día aproximadamente. Nominalmente, después de las tres primeras maniobras, la órbita estará ya por encima del anillo protegido establecido por ISO. Las maniobras orbitales se utilizarán también para reducir la velocidad de rotación del satélite y disipar su energía cinética. El satélite seguirá realizando maniobras, con la misma periodicidad, hasta que todo el combustible a bordo se haya agotado. Justo entonces, en menos de una semana, Meteosat-7 llegará a su órbita cementerio final desde el anillo geoestacionario y concluirá su proceso de pasivación.
Para ayudar en estas operaciones críticas, GMV realizará cada noche observaciones desde nueve telescopios diferentes de todo el mundo para seguir la evolución de la trayectoria de la nave. Estos telescopios, operados por el socio de GMV, ISON (International Scientific Optical Network), están situados en distintos emplazamientos en seis países diferentes, a fin de asegurar la máxima redundancia en caso de malas condiciones meteorológicas u otras contingencias.
Los datos recogidos se procesarán y enviarán diariamente, para hacer frente a las necesidades de monitorización aumentada de EUMETSAT. Estos datos se utilizarán para dar soporte al seguimiento de las operaciones, de acuerdo con las mediciones periódicas de la red de estaciones terrenas de EUMETSAT. Se asegurará con ello la máxima fiabilidad de los dos principales procesos que intervienen en esta actividad de monitorización: el proceso de determinación de órbita (mediciones y datos ópticos utilizados de manera singularizada o con técnica de fusión de datos) y la restitución/calibración de las maniobras ejecutadas, que se realizarán en ambos casos durante estas operaciones críticas.
Como parte de esta actividad, y en paralelo con las operaciones en EUMETSAT, GMV hará uso de sus más avanzadas herramientas de dinámica de vuelo para realizar tareas independientes de comprobación y monitorización de las maniobras y de la evolución orbital de la nave. Las soluciones GMV, que utilizarán todos los telescopios y estaciones de localización implicados, verificarán si son correctos los datos operacionales de EUMETSAT.