Ante la entrada en vigor del nuevo Reglamento General de Protección de Datos de la Unión Europea, de obligado cumplimiento en 15 meses, son muchas las dudas a las que las empresas deben hacer frente ¿Cómo deben prepararse? ¿Qué cambios han de afrontar? ¿Favorece o compromete más la nueva normativa?...

Para dar respuesta a preguntas como estas, el medio especializado en innovación tecnológica IT User ha invitado a un grupo de expertos para que compartan su punto de vista acerca de este nuevo escenario.

Javier Zubieta, Responsable de Desarrollo de Negocio de Ciberseguridad de GMV fue uno de los protagonistas de esta mesa, manifestando que este tipo de legislación “ayuda a dinamizar el sector. Damos la bienvenida a una ley que va a en favor de incrementar los niveles de ciberseguridad. Hemos visto con la LOPD, y lo veremos también con la nueva norma, que hay dos planos que quieren converger. Por un lado, el plano legal, y por otro los procesos tecnológicos. Deberíamos, aprendiendo del pasado, conjugar las velocidades entre ambos planos para cumplir con la norma”.

Con la idea de ser más prácticos, Javier Zubieta indicó que es importante tener en cuenta el presupuesto para adecuarse, “algo que no suele aparecer hasta que ya es imperativo. Algunos ya se han podido ir preparando, y es conveniente que sigan haciéndolo en dos temas muy importantes. Por una parte, la notificación en caso de incidente, algo totalmente novedoso, que está generando mucho debate en las empresas. Segundo, las empresas de seguridad hemos ido publicando bastantes best practices de cómo cumplir con la nueva normativa, sobre todo desde un punto de vista tecnológico. Se trata de un trabajo muy interesante para aquellas empresas que puedan verse afectadas. En todo caso, hasta que no llegue a mayo de 2018, algunos no terminarán de preocuparse”.

Los cambios son amplios y el tiempo es corto, aunque la parte positiva es que España es uno de los países más preparados, al igual que Alemania, y donde el trabajo por hacer es menor. Javier Zubieta comentó: “creo que, en este caso, los españoles no debemos tener complejos, más bien al contrario. En lo que se refiere a cumplimiento de la nueva norma, estamos al mismo nivel o mejor que los mejores países”.

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