La Industria debe evolucionar a un nuevo enfoque orientado a la personalización y el valor añadido que se da a los clientes
La gran revolución que estamos aconteciendo en los últimos años es un proceso continuado de transformaciones sociales, tecnológicas y económicas que tienen su origen en la irrupción masiva de Internet a mediados de la década de los 90 del siglo pasado en sucesivas aplicaciones a distintos entornos socioeconómicos. Actualmente se observa un desarrollo bastante acentuado en la Industria. En este entorno la innovación se configura como una necesidad estratégica en el desarrollo empresarial. Asimismo, la incorporación y aplicación del talento es clave para el éxito de nuevos modelos de negocio que están aún por manifestarse. Estos temas trató Miguel Hormigo, Director Sector Industria de Secure e-Solutions de GMV, en su intervención en la mesa de debate sobre tendencias y oportunidades del Smart Energy Congress.
Miguel Hormigo realizó un breve recorrido sobre el impacto de la Primera Revolución Industrial y su paralelismo con lo que actualmente llamamos Industria 4.0, para posteriormente distinguir la convergencia, la personalización y las tecnologías que han sido fundamentales para llevar a cabo esta nueva transformación digital que provoca una eficiencia operacional y nuevos modelos de negocio. El asunto principal de la ponencia se basaba en cómo está evolucionando la Automatización en la Industria 4.0, pieza fundamental para lograr una mayor productividad, eficiencia en recursos, calidad y seguridad. También comentó lo que queda por venir, como por ejemplo el 6G o los nuevos avances en robótica colaborativa y virtual.
En este entorno industrial, las nuevas tecnologías están acelerando la fusión de los mundos del diseño virtual y de equipamientos físicos, requiriendo la creación de nuevos modelos de negocios que deben apoyar la convergencia de IT y OT para habilitar los servicios digitales. Se habla de un número de conexiones IoT a nivel mundial que pasará de los 14,87 miles de millones que teníamos en 2016 a 36,13 en 2021. Además, las ventas de robots colaborativos en 2018 fueron de 58.000, mientras que para 2020 se estima que la cifra sea de 150.000.
Hace un siglo, la producción en masa abrió nuevas oportunidades a la industria y a los consumidores pero en la actualidad las prioridades han cambiado. Ahora los consumidores buscan diferenciarse, aumentando la demanda de productos personalizados a sus necesidades y, asociada a ella, un cambio en los procesos de fabricación. Con esta cuestión, han surgido nuevos servicios para ofrecer al cliente participar directamente en la personalización del producto que va a adquirir; los modelos de suscripción, economía colaborativa, Manufacturing as a Service (MaaS), Do It Yourself (DIY), entre otros. Otra tendencia importante que ha querido destacar Hormigo es la demanda de una industria “más verde”, energías renovables y la necesidad de conversión de industrias, ya que 3 de cada 4 personas pertenecientes a las nuevas generaciones pagarían más por productos y servicios sostenibles. "La Industria 4.0 no es solo pensar en tecnologías que debemos implantar para mejorar los procesos industriales, es centrarnos en el cliente y darle lo mejor que está demandando" argumentó Hormigo.
No obstante, estamos en una era de incertidumbre. La Automatización eliminará puestos de trabajo (como ha ocurrido habitualmente en todas las revoluciones industriales previas) pero a su vez surgirán una gran cantidad de trabajos nuevos y más cualificados que exigirán una demanda muy alta en el mercado laboral, desde un especialista en robótica hasta un ingeniero programador o un matemático especializado en Big Data. En cualquier caso, esta industria conectada no solo demandará empleos STEM, también exigirá la formación de talento para crear perfiles adaptados al mercado con habilidades de innovación, creatividad, iniciativa, pensamiento crítico, etc.