GMV desempeña un papel clave en el segmento terreno de la segunda generación de Galileo
La primera generación de Galileo (G1G) está operativa desde diciembre de 2016. Consta de infraestructuras espaciales (26 satélites hoy en día) y de infraestructuras terrestres. Con más de 400 millones de usuarios en todo el mundo, presta servicios de posicionamiento, navegación y sincronización a nivel global, con una precisión de 20 cm.
Los principales objetivos de la segunda generación del Galileo o, de forma abreviada, G2G, son la introducción de nuevos servicios, la mejora de los ya existentes, el aumento de la solidez de los sistemas, el incremento de la seguridad y la reducción tanto de los costes operativos como de los de mantenimiento del sistema. Todo ello con el objetivo de consolidar la posición de Galileo como uno de los principales sistemas GNSS del futuro.
El G2G se divide en varias fases. En la primera, dirigida por la ESA, se definieron a nivel de sistema los requisitos de la misión. A ésta, le siguió una fase de preparación y posteriormente se llevarán a cabo las fases de implementación. La fase de preparación se dividió a su vez en varias partes, que ejecutadas en paralelo por varios consorcios, han comprendido por un lado actividades espaciales y por otra, actividades terrenas. Además de ser contratista principal en varios proyectos para definir los requisitos de la misión, en la fase de preparación y desde 2018, GMV encabeza uno de los consorcios que trabaja en el segmento terreno completo del G2G.
Dentro de la fase de preparación, poco antes del inicio del confinamiento por la COVID, la Agencia espacial Europea (ESA) dio por concluida con éxito la fase B1. Una vez acabada esta fase, la ESA lanzó una oferta para la nueva fase, la B2, que supone la antesala a la fase de implementación de G2G.
Aunque la publicación de la invitación a ofertar para esta fase se retrasó hasta mediados de junio, GMV no ha interrumpido sus actividades en el marco del G2G. Durante estos últimos meses, GMV ha reforzado el equipo del proyecto con nuevas incorporaciones y nuevos socios, ha trabajado en nuevas ideas y ha arrancado algunas de las actividades en el marco del proyecto. Los integrantes del equipo han asistido a distintos cursos con objeto de aumentar sus competencias, y parte del mismo se ha certificado como SAFe® 5 Agilist. Asimismo, durante estos meses, GMV se ha preparado para adecuarse a la nueva realidad que ha traído la pandemia en lo que respecta a las nuevas formas de trabajo: teletrabajo, reuniones virtuales o el uso de nuevas herramientas.
Todo este trabajo y esfuerzo se ha visto recompensado y recientemente la ESA ha seleccionado de nuevo a GMV como uno de los tres contratistas principales de la fase B2 del segmento terreno de G2G.
GMV está perfectamente preparada para abordar con éxito esta nueva fase. Con este nuevo éxito en el área de la navegación por satélite, y en concreto en el marco del programa Galileo, la compañía se posiciona como una de las empresas clave para la fase de desarrollo e implementación del segmento terreno de G2G.