La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha presentado un “Decálogo de medidas urgentes para impulsar la I+D+i en España”. Luis Fernando Álvarez-Gascón, Director General de Secure e-Solutions de GMV y como Vicepresidente de la Comisión de Investigación, Desarrollo e Innovación de la CEOE, en representación de AMETIC, ha colaborado en la elaboración del documento.

La elaboración de este documento es el resultado del convencimiento que tiene la CEOE de que España necesita reforzar su apuesta por la I+D+i y la digitalización como herramientas de competitividad. Durante la presentación del “Decálogo de medidas urgentes para impulsar la I+D+i en España”, el presidente de la CEOE Juan Rosell ha señalado que “la I+D+i es una prioridad y tiene que estar en la agenda política siempre”.

Este decálogo no pretende ser sólo un documento de reflexión, que desgrane los componentes fundamentales que hacen que la I+D+i deba ser una prioridad para nuestra sociedad; además es un documento de ejecución, puesto que sugiere medidas concretas para mejorar nuestro actual marco legislativo y el llamado ecosistema de la innovación.

El presidente de la Comisión de I+D+i de CEOE, Juan López-Belmonte ha explicado en qué consisten estas medidas que los empresarios proponen para mejorar la situación de la I+D+i en España, comenzando con un gran Pacto de Estado en esta materia. Los empresarios proponen que la I+D sea respaldada por el liderazgo de la presidencia del Gobierno y que mejore su partida en los Presupuestos Generales del Estado.
La semana pasada, durante la presentación de los Presupuestos Generales del Estados 2018, el Gobierno señaló que “entre las políticas que más crecen se encuentra la política de I+D+i, con un incremento de los recursos del 8,3% respecto a 2017, lo que supone 560 millones de euros más, hasta alcanzar los 7.044,47 millones”.

"Ya llevamos tiempo perdido y tenemos que rectificar porque estamos al final del camino", ha afirmado Juan Rosell que, también, ha resaltado la necesidad de aumentar la inversión, tanto pública como privada, así como de simplificar y recuperar la seguridad jurídica de las deducciones fiscales por actividades de I+D+i que hoy día "no es suficientemente clara". Para Rosell, seguir este decálogo es la forma de homologarnos a los grandes países europeos.

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