One Hacker entrevista a Julio Vivero, Jefe del área de Consultoría e Infraestructuras de GMV
Le apasiona cómo Internet está cambiando el mundo y, como Jefe del Área de Consultoría e Infraestructuras de GMV, trabaja para hacer la red más segura. Para ello desarrolla tecnologías como atalaya, checker o arkano, que parecen sacadas del mundo de la ciencia ficción… pero ya son una realidad.
Cada vez estamos más conectados…
Sí. Nuestra vida depende de Internet. Realizamos las compras online, pagamos impuestos, buscamos pareja… incluso nos reunimos sin vernos. Antes hablábamos por teléfono; ahora nos enviamos mensajes… y lo hacemos sin pensar en los peligros que corremos. Por ejemplo, la foto que publicamos en nuestro perfil de WhatsApp o la frase que identifica nuestro estado puede dar mucha información a delincuentes que quieran saber de nosotros y les basta con conseguir nuestro número de teléfono para acceder a nuestra vida… Tampoco somos conscientes de que al navegar por google –sobre todo si tenemos una cuenta Gmail-, nuestras búsquedas quedan registradas. Y, si lo hacemos desde el móvil, podemos dejar rastro hasta de los lugares en los que hemos estado. Para evitarlo, tenemos que entrar en la cuenta de Google –https://acount.google.com y borrarlos. Nada es gratis: en realidad, lo que hacemos en Internet es pagar con datos.
Qué te apasiona y qué te da respeto…
Me fascina la velocidad con la que cada día aparecen nuevas tecnologías que cambian nuestra forma de vida. En cambio, me impone respeto la pérdida de privacidad que en muchas ocasiones éstas conllevan. Por ejemplo, los últimos modelos de contadores de luz –los llamados “smartmeters”- almacenan información de nuestro consumo hora a hora. Si un delincuente tuviera acceso a ellos, sabría cuando estamos en casa, cuándo no… e incluso qué aparatos usamos y a qué hora, al comprobar la cantidad de energía consumida. Y lo que es peor, podría usar esta información para entrar a robarnos. Lo que hacemos en el mundo virtual suele tener consecuencias en el mundo físico.
Nombra tres tecnologías que parecen de ciencia ficción, pero son reales
La primera es un proyecto increíble del Instituto Tecnológico de Massachussetts -MIT-. Se llama RF Capture y, mediante sensores y una red wifi, permite saber quién está detrás de una pared y saber si se encuentra bien. Está pensada para controlar el estado de personas mayores que viven en una casa, pero evidentemente también tiene muchas aplicaciones civiles y militares.
La segunda tecnología que me gustaría mencionar es el proyecto Oxford de Microsoft. Su tecnología de reconocimiento facial permite averiguar cuáles son las emociones de una persona a través de su cara. Gracias a esta tecnología, en un aeropuerto se podría detectar a personas que den muestras de nerviosismo porque lleven drogas o explosivos.
Por último, la gran tecnología que me maravilla más es la inteligencia artificial. Algunos científicos, como Stephen Hawking, alertan de que con ellas las máquinas se podrían sublevar. Pero actualmente, la inteligencia artificial nos permite analizar todos los datos que hay en el ciberespacio –incluso en la Deep web, la red a la que se accede a través de pasarelas especiales no visibles desde el Internet “normal”- y saber cuándo se va a producir un ciberataque contra una empresa, un país, la banca… En GMV hemos desarrollado atalaya, un producto que, gracias a su “inteligencia”, aprende de su experiencia para buscar amenazas, vulnerabilidades, fraudes, etc.
¿Qué os diferencia del resto?
Además de que siempre aceptamos los retos porque la innovación forma parte de nuestro ADN no buscamos el beneficio a corto plazo. Somos una empresa que da pasos firmes y seguros conscientes de que el éxito de la compañía está en el de nuestros clientes, pensamos en el largo plazo. GMV nació hace más de 30 años apostando por el talento y la calidad, dos razones por las que nuestro cliente no es ocasional. Le acompañamos durante años en su crecimiento… Le ayudamos en sus problemas del día a día protegiendo su negocio.
Los ataques más graves en 2016…
Serán los llamados APTs –Ataques Persistentes Avanzados-. Son ciberataques que pasan desapercibidos para las empresas y que roban su información crítica llegando a suponer su quiebra. Los atacantes a los que nos enfrentamos forman parte de grandes grupos, muy organizados y con todo tipo de recursos. Afortunadamente, productos como checker ayudan a combatir estas amenazas, ayudando a las entidades financieras –bancos fundamentalmente- a controlar el software que se ejecuta dentro de los cajeros automáticos de su red, de tal forma que sólo el software conocido y permitido por la entidad pueda ejecutarse dentro del cajero. Pero no hay que olvidar que el punto más crítico de la seguridad son las personas: los mayores ataques siempre se producen por descuidos –o malas intenciones-.
¿Qué es lo más curioso que hayáis hecho en ciberseguridad en GMV?
Entre nuestros clientes figuran muchos organismos que tienen la seguridad como prioridad, por citar algunos de los más conocidos, Europol o la Agencia Espacial Europea, y hay muchos proyectos que destacaría. Pero por citar uno, el análisis de riesgos de ciberseguridad que realizamos para la ESA: Les hemos formulado una serie de recomendaciones a la hora de controlar los riesgos para los diferentes tipos de misiones espaciales.
Fuente: One Hacker