El pasado mes de noviembre, la Agencia Europea de Defensa (EDA) publicó dos documentos que proporcionan una visión de las capacidades militares europeas para los próximos años.

El primero de ellos, es el documento “Enhancing EU Military Capabilities Beyond 2040”. Este documento identifica las principales tendencias que darán forma a las capacidades militares y los avances tecnológicos en el sector defensa en los próximos 20 años.

El análisis de la EDA identifica seis factores globales que influirán en el entorno estratégico futuro, como son: los efectos del cambio climático que podrían traer escasez de agua y de materias primas; los cambios demográficos provenientes de la migración; la complejidad internacional y el impacto de las cadenas de suministro en la economía; los cambios de poder en el orden mundial;  el nuevo entorno de seguridad donde los conflictos híbridos son cada vez más comunes; y la continua digitalización de la sociedad que conlleva nuevos riesgos y amenazas incluido el uso cada vez mayor de la ingeniería social y la desinformación.  

Las tecnologías disruptivas emergentes (EDT) jugarán un papel clave en la configuración de los requisitos y las capacidades militares más allá de 2040. En este análisis se analizan nueve EDT desde la perspectiva del desarrollo de capacidades, para describir posibles aplicaciones militares y desafíos a considerar como parte del futuro campo de batalla.

Entre ellas, los sistemas autónomos son un valioso ejemplo en este sentido, ya que se están incorporando rápidamente en las capacidades militares y se espera que se aceleren en los próximos años. Las armas disruptivas novedosas, como las armas hipersónicas y de energía dirigida, traerán nuevas oportunidades y desafíos para las fuerzas armadas.

De igual modo, la inteligencia artificial, el Internet de las cosas, la biotecnología y la mejora del rendimiento humano, los materiales avanzados y la fabricación aditiva, la inteligencia artificial, el blockchain, las tecnologías cuánticas, las nuevas tecnologías espaciales tendrán un impacto significativo en las capacidades militares futuras.

En relación con las capacidades militares, la conectividad multidominio; la superioridad cognitiva que permite una conciencia situacional en tiempo casi real; la capacidad de disponer y gestionar energía de fuentes diversas; la capacidad de contrarrestar los futuros sistemas de armas; y una mayor dependencia de los activos basados en el espacio se espera que sean las tendencias clave en el futuro.

Todo este análisis ha sido considerado para llevar a cabo una revisión de las capacidades prioritarias de la UE, que se recogen en el documento The 2023 EU Capability Development Priorities (CDP) recientemente revisado y aprobado por los Estados Miembros en noviembre de 2023.

El CDP es una herramienta de planificación integral que proporciona una visión de las capacidades militares europeas a lo largo del tiempo. Este documento identifica las prioridades de la UE en materia de defensa y las oportunidades de cooperación entre los Estados miembros.

La revisión del CDP en este momento refleja los cambios en el entorno estratégico de la UE, la orientación política proporcionada por la Brújula Estratégica aprobada en 2022 y las lecciones extraídas de la guerra de Ucrania. Para su elaboración, se tienen en cuenta las carencias existentes en el contexto de la Política Común de Seguridad y Defensa, las lecciones extraídas de las operaciones y misiones recientes y la cooperación prevista. También, se considera el análisis de las perspectivas tecnológicas a largo plazo y de los futuros entornos operativos, siendo este aspecto el que se ha resumido previamente.

El resultado es un conjunto de 22 prioridades, que además de reafirmar las prioridades de años anteriores, incluye otras nuevas derivadas del profundo cambio en el entorno estratégico de la UE. Refleja dónde sigue siendo necesario proseguir los esfuerzos en determinados ámbitos (por ejemplo, la ciberdefensa, el acceso al espacio, el dominio del espectro electromagnético, los sistemas no tripulados o el combate de precisión terrestre) y en los que se han mitigado las carencias detectadas anteriormente (por ejemplo, el reabastecimiento en vuelo y la lucha contra los artefactos explosivos improvisados).

Estas prioridades se desarrollarán en los próximos años a través de una serie de iniciativas y herramientas de defensa de la UE, como la Revisión Anual Coordinada sobre Defensa (CARD), la Cooperación Estructurada Permanente (PESCO) y el Fondo de Defensa Europeo (EDF). Igualmente, guiarán las actividades de investigación e innovación en el ámbito de la defensa, guiando el contenido de la agenda de investigación y la participación con la industria.

Será en consecuencia necesario, tanto a nivel industrial como por parte de los Estados Miembros, llevar a cabo un compromiso profundo con la colaboración y la innovación, así como la voluntad de adoptar nuevas tecnologías. 

GMV es un referente en el desarrollo de sistemas que están directamente relacionados con algunas de las prioridades del CDP, como el empleo de IA para sistemas de mando y control y sistemas no tripulados UxS, navegación, ISTAR , entre otros.

Desde GMV, seguiremos innovando y participando en los proyectos de colaboración a nivel europeo, tanto en el EDF, como en otros ámbitos, que nos permitan desarrollar las capacidades que serán necesarias para nuestras Fuerzas Armadas en el futuro.

Autor: Begoña Rojo