En las zonas rurales de la Unión Europea (UE) la población es, por lo general, de mayor edad que en las zonas urbanas. Está previsto, además, que en la próxima década esta población empiece a disminuir. Esto, sumado a la falta de conectividad, el subdesarrollo de las infraestructuras, la falta de oportunidades de empleo y el acceso limitado a los servicios, ha convertido a las zonas rurales en entornos menos atractivos para vivir y trabajar. 

Las zonas rurales desempeñan, no obstante, un papel activo en la transición ecológica y digital de la Unión Europea. Alcanzar los ambiciosos objetivos digitales de la UE para 2030 pueden brindar más oportunidades para el desarrollo sostenible de estas áreas más allá de la agricultura, la ganadería y la silvicultura, al crear nuevas perspectivas para el crecimiento de la industria manufacturera y, especialmente, de los servicios, y al contribuir a un mejor reparto geográfico de los servicios y las industrias.

En este contexto, la Comisión Europea presentó en junio de 2021 el Plan de Acción Rural de la Unión Europea con el objetivo de impulsar un desarrollo rural sostenible, cohesionado e integrado. Este plan define varios ámbitos de actividad, apoyados por iniciativas emblemáticas y encaminados a facilitar que las zonas rurales sean o estén más fuertes (capacitando a las comunidades rurales, mejorando su acceso a los servicios y facilitando la innovación); más conectadas, tanto en términos de transporte como de acceso a servicios digitales, y más prósperas, diversificando para ello sus actividades económicas. 

El reto demográfico, así como la cohesión territorial y social, suponen un desafío a nivel europeo que exige una clara toma de decisiones centradas en aquellos espacios más afectados por la desigualdad territorial: los pequeños municipios y las áreas rurales.

La experiencia ha demostrado que el modelo de concentración territorial no ha tenido un efecto impulsor 
sobre territorios próximos, lo que ha traído como principal consecuencia una falta de equidad social que, en ocasiones, se ha materializado en la diferencia de oportunidades para unos y otros en función de su lugar de residencia. De este escenario parte la necesidad de recuperar los planteamientos del desarrollo territorial policéntrico con el objetivo de promover el impulso de las pequeñas y medianas ciudades, así como de los territorios rurales.

Hacia una movilidad sostenible

El transporte interurbano regional se caracteriza por tener un elevado número de rutas de débil tráfico con un bajo nivel de ocupación y poca cobertura económica. De hecho, muchas de las líneas regulares de transporte que prestan servicios regionales tienen unos resultados de explotación negativos. Se trata, en su mayoría, de servicios deficitarios que atienden multitud de rutas que conectan localidades de escasa población con los principales núcleos urbanos. Siendo servicios públicos, su principal objetivo reside en garantizar la movilidad de los ciudadanos.

En este contexto, las infraestructuras de transporte son elementos esenciales para el desarrollo de los territorios y la cohesión social y territorial, así como para el incremento de la productividad, la mejora de la competitividad y la capacidad de exportación de la economía. Por ende, resulta fundamental que estas infraestructuras sean fiables, sostenibles, resilientes y de calidad.

El camino hacia la movilidad sostenible requiere, entre otros aspectos, de un marco de colaboración público-privada que facilite y acelere la implantación de soluciones eficientes. Sin embargo, no solo es un deber de las administraciones públicas asumir ese liderazgo, sino que también las empresas privadas pueden contribuir y acelerar esta necesidad, que realmente es un mandato de los ciudadanos.

Los mensajes de Europa con el objetivo de reducir las emisiones se ven reforzados por el Programa Europeo de Recuperación impulsado por la Comisión Europea en respuesta a la pandemia de COVID-19 y con el que, una vez más, se busca impulsar proyectos transformadores para avanzar en la dirección de una Europa más digitalizada y sostenible. El objetivo de los fondos europeos es promover la cohesión económica, social y territorial de la Unión Europea alrededor de la transformación digital, la transición ecológica y el crecimiento. La transformación de la movilidad es determinante para la economía de un país y para sus ciudadanos. Esta enorme apuesta de la Unión Europea presenta un reto para la necesaria cooperación y colaboración entre las administraciones públicas y el sector privado que permitirá acelerar la transformación hacia la movilidad sostenible.

Objetivos de movilidad sostenible

Con la finalidad de incrementar la resiliencia de las infraestructuras de transporte ante nuevas demandas y retos se han definido una serie de objetivos en materia de movilidad sostenible entre los que se encuentra la digitalización y la sostenibilidad en el transporte.

En concreto, en vista de las necesidades existentes en el modelo de transporte público regular de viajeros en el ámbito regional, se han definido un conjunto de requerimientos, entre los que se encuentran el impulso del transporte a la demanda, la integración del transporte escolar mediante fórmulas de prestación conjunta que logren un sistema más eficiente y sostenible y la gestión de flujos de movilidad en base a áreas de influencia. 

En este contexto, la tecnología y arquitectura planteadas para afrontar estos retos no solo deben asegurar su correcto funcionamiento y la modernización de los sistemas utilizados en la actualidad, sino también su mantenimiento, adaptabilidad y escalabilidad futura. Todo ello teniendo en cuenta las premisas de la interoperabilidad con terceros, el uso de estándares internacionales, la aplicación de normas abiertas y públicas, el foco en el usuario y una arquitectura modular y abierta.

GMV ha demostrado que cuenta con una potente e innovadora solución para dar respuesta a estas necesidades. Una solución que, además, es extrapolable a otros ámbitos más allá de las regiones, como es el caso de las autoridades de transporte metropolitano o los consorcios de transporte regionales, así como administraciones análogas a escala internacional.

Los sistemas implementados por GMV destacan por varias razones. En primer lugar, por su capacidad de disponer de forma homogénea y centralizada de la información sobre la oferta total de servicios, así como para proporcionar un flujo de información en tiempo real a los usuarios del servicio, lo que reduce los tiempos de espera en la parada, entre otros beneficios. Asimismo, estos sistemas permiten un control más exhaustivo y cercano del billetaje en tiempo real, agilizando las tareas del personal de Administración y facilitando la planificación, diseño y operación de los servicios de transporte mediante diagnósticos inmediatos. 

Los proyectos de sistemas centrales ITS, que constituyen el nivel superior en la arquitectura definida por los clientes, comprenden el suministro de un centro de control capaz de integrar datos provenientes de múltiples operadores. Este centro de control está compuesto por un back-end en el que se encuentran todos los módulos principales y la lógica de negocio necesaria en el sistema para la implementación de las funcionalidades, así como de un 
front-end para su manejo por los usuarios, de forma que cada usuario accede únicamente a la información según sus permisos y el nivel jerárquico al que pertenece. 

La plataforma incluye también un módulo común de Business Intelligence dedicado a la explotación y análisis de los datos y métricas de movilidad, accesibles al personal de operación de los distintos actores mediante cuadros de mando e informes generados de forma flexible en el sistema a través de una herramienta web y al cual se puede acceder según los permisos y roles definidos para el personal (interno o externo).

En concreto, el centro de control contiene funcionalidades relativas al sistema de ayuda a la explotación (SAE), dotado de una arquitectura basada en últimas tecnologías y estándares de calidad de software, con aplicaciones que puedan implementarse y modificarse con independencia unas de otras, e integrada, sin carencias de información, sin datos duplicados y sin procesos redundantes. También incluye funciones de validación y venta que responden a la necesidad de digitalización de todos los medios de pago habituales aceptados a nivel mundial, permitiendo acceder al transporte utilizando tarjetas de transporte, QRs y pago bancario. 

El centro de control proporciona también información al viajero mediante el envío de información a través de protocolos de estándares abiertos, con el objetivo de alimentar otros sistemas utilizando estándares similares, como GTFS y estándar CEN NeTEX, datos en tiempo real por GTFS-RT y por el estándar CEN SIRI y, adicionalmente, interfaces de integración eficientes y abiertas no estándares. Por último, el centro de control permite la integración con otros sistemas a través de estándares, tanto dentro de la arquitectura ITS (Intelligent Transportation Systems) definida por cliente (como la integración con el nivel 3 de la arquitectura ITS de la Administración), como con sistemas externos. 

ITS Suite

Después de más de 25 años proporcionando soluciones ITS en todos los continentes, GMV ha implementado e implementará la mejor tecnología ITS disponible en el mercado. Esta tecnología es fruto de la evolución de las soluciones llevadas a cabo en los últimos cinco años y que pueden proveer un excelente servicio dado su experiencia y madurez. 

La solución proporcionada por GMV está basada en ITS Suite, un sistema de última generación en el estado del arte, extensible, escalable y abierto, que sigue una arquitectura fundada en microservicios. Cabe destacar este software, no sólo por su vanguardia tecnológica sino también por la experiencia de usuario de primer nivel, priorizando la usabilidad por parte de usuarios, operadores y administradores del sistema. 

Estos sistemas se basan en los principios de escalabilidad e interoperabilidad. Además, se fundamentan sobre normas y estándares internacionales permitiendo una integración eficiente y operacional, tanto entre los distintos niveles del modelo ITS planteado, como con otros sistemas externos.

Sus ventajas son múltiples, puesto que optimizan los procesos involucrados y permiten la digitalización de los sistemas administrativos y la disponibilidad de datos de transporte público, en dos planos diferenciados: en tiempo real y en forma de históricos, redundando, a su vez, en los usuarios que tendrán acceso a un servicio de transporte público de mayor calidad, con información optimizada y personalizada, más seguro e inclusivo.

Finalmente, estos sistemas permitirán la cooperación y el intercambio de información con otras administraciones con competencias de transporte, lo que fomentará que el potencial de la digitalización alcance un mayor grado de desarrollo, permitiendo la interconexión entre modos de transporte, infraestructuras y el territorio en su conjunto, optimizando de esta manera el sistema de transporte a escala nacional. 

Liderazgo de GMV en sistemas ITS regionales en España

En el caso particular de un medio rural como el español, con pequeños núcleos de población dispersos que ocupan el 84,1 % de la superficie y una población cada vez más envejecida –las personas de 65 años o más constituyen un 23,8 % en los territorios rurales frente al 18,4 % en los urbanos, según el informe anual de indicadores del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de 2019–, la escasez de servicios de calidad perjudica especialmente a jóvenes y a personas mayores que no gozan de autonomía. Para abordar estos desafíos y asegurar una movilidad sostenible es necesario implementar políticas y acciones que garanticen la accesibilidad universal a servicios básicos promoviendo, por ello, alternativas de transporte público eficientes y adaptadas a las necesidades de la población.

Por todo lo anterior, dentro del Componente 6 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (enmarcado dentro de los planes nacionales que han elaborado los 27 Estados miembro de la Unión para acogerse al Plan de Recuperación para Europa NextGenerationEU), se incluyen una serie de medidas e inversiones destinadas a modernizar, digitalizar y mejorar la seguridad y sostenibilidad de las infraestructuras clave de transporte interurbano e intermodales en todo el territorio nacional.

Es en este escenario en el que diversas comunidades autónomas han licitado en el año 2023 el suministro e implantación de un sistema central de gestión ITS que permita integrar toda la información del transporte público interurbano de las distintas concesiones que integran los correspondientes mapas concesionales y gestionar todos los servicios que se deben generar a partir de esta información para la administración, los operadores y los ciudadanos con el fin de mejorar los sistemas tecnológicos asociados al transporte público regional. 

GMV ha demostrado que cuenta con una potente e innovadora solución para dar respuesta a las necesidades de las administraciones regionales. En este contexto, la compañía es proveedora desde 2015 del sistema de gestión del transporte en Galicia, integrando la información de 127 concesiones y más de 3500 vehículos de los diferentes operadores de transporte por carretera con sus SAEs y, en el año 2022, renovó el sistema SAEi multiflota para la Autoridad del Transporte Metropolitano del área de Barcelona (sistema pionero que implantó inicialmente en el año 2001). Como continuidad a este posicionamiento de liderazgo tecnológico, GMV ha resultado adjudicataria del desarrollo y puesta en marcha de las plataformas de digitalización de Castilla León, Castilla La Mancha, Región de Murcia y Aragón. La solución implementada por GMV es un sistema de última generación en el estado del arte, extensible, escalable, interoperable y abierto, lo que hace posible su replicación a nivel nacional e internacional.

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