En un mundo cada vez más digitalizado, la inteligencia artificial (IA) se erige como un motor de transformación en diversos sectores, y el turismo no es una excepción. Durante la reciente presentación de José Carlos Baquero, director de la División de Inteligencia Artificial y Big Data de Secure e-Solutions de GMV, en el webinar titulado “Planificación de los viajes e IA: innovación y ética”, organizado por Barcelona Travel Hub, se exploró la realidad actual de la IA y sus perspectivas en un futuro inmediato. El experto destacó el firme posicionamiento de la compañía en este ámbito, desarrollando herramientas tecnológicas y desplegando proyectos de impacto significativo. Asimismo, compartió su experiencia en el asesoramiento para la elaboración de la legislación europea de IA vigente.

Como expuso Baquero, la IA se encuentra presente en nuestra vida cotidiana, aunque a menudo no somos plenamente conscientes de su influencia. La IA está omnipresente desde nuestros teléfonos inteligentes hasta los coches autónomos y los asistentes virtuales. El crecimiento del mercado de la IA es exponencial, y lo que conocemos hoy es solo el principio; la IA que utilizamos actualmente es la más rudimentaria de la que tendremos en el futuro, dado que su evolución es constante. Sin embargo, “este avance conlleva retos significativos que debemos estar preparados para afrontar” afirmó.

Hay que reparar en uno de los aspectos más críticos de esta tecnología, porque “puede influir en nuestro futuro de maneras imprevistas y no deseadas”. Las decisiones basadas en recomendaciones de IA pueden tener un impacto duradero en nuestra sociedad. En el sector turístico, la IA está revolucionando la atención al cliente y personalizando experiencias, pero es fundamental garantizar su uso ético y seguro. Dado que la IA actual se entrena con datos del pasado, no está exenta de sesgos relacionados con el género, la raza y otros factores. Por ello, es esencial establecer límites y definir regulaciones para el desarrollo de aplicaciones de IA que aseguren un uso responsable y que no generen rechazo en la población, concluyó el experto de GMV.